ACCESORIOS EN CUERO PARA ARMÓNICAS
Al poco de empezar con la armónica, caí en el vicio que tenemos muchos
armonicistas... llevar siempre consigo una armónica. Mi primera armónica
fué una Marine Band y lo que hacía era llevarla en el bolsillo metida
en su caja.
Como muchos sabréis la Marine band no ajusta perfecta en su caja, el interior de esta es mayor que el tamaño de la armónica y esta se anda moviendo y golpeando el interior de la caja.
Para evitar esto llevaba un trozo de tela doblado en el fondo de la caja de manera que la armónica quedase ajustada dentro y no bailase de un lado a otro.
Aun así la caja se hace un tanto aparatosa para llevarla y sobre todo en verano que tan sólo cuentas con los bolsillos del pantalón... Por todo esto me empeñé en hacerme una funda que la protegiese y que hiciese que llevarla en el bolsillo fuese algo cómodo.
Llevarla suelta sin más en el bolsillo es algo que descarté inmediatamente pues aparte de que llaves, monedas y otras cosas con las que pudiera coincidir allá podrían afectarle, es seguro que se llenaría de pequeñas porquerías que bloquearían las lenguetas...
Mis trabajos en cuero comenzaron en ese momento con la idea de hacerme una funda para mi armónica. Jamás había hecho nada en cuero y no tenía la menor idea de cómo empezar, así que busqué un poco en internet, ví cómo se cosía el cuero y ahí comenzó todo...
Como muchos sabréis la Marine band no ajusta perfecta en su caja, el interior de esta es mayor que el tamaño de la armónica y esta se anda moviendo y golpeando el interior de la caja.
Para evitar esto llevaba un trozo de tela doblado en el fondo de la caja de manera que la armónica quedase ajustada dentro y no bailase de un lado a otro.
Aun así la caja se hace un tanto aparatosa para llevarla y sobre todo en verano que tan sólo cuentas con los bolsillos del pantalón... Por todo esto me empeñé en hacerme una funda que la protegiese y que hiciese que llevarla en el bolsillo fuese algo cómodo.
Llevarla suelta sin más en el bolsillo es algo que descarté inmediatamente pues aparte de que llaves, monedas y otras cosas con las que pudiera coincidir allá podrían afectarle, es seguro que se llenaría de pequeñas porquerías que bloquearían las lenguetas...
Mis trabajos en cuero comenzaron en ese momento con la idea de hacerme una funda para mi armónica. Jamás había hecho nada en cuero y no tenía la menor idea de cómo empezar, así que busqué un poco en internet, ví cómo se cosía el cuero y ahí comenzó todo...